#BaresNotablesActualidad
Los Angelitos
En #JotaPosta continuamos yirando por los rincones de Buenos Aires descubriendo esos #BaresNotables que todavía permanecen, estoicos, orgullosos, con marca indeleble en historia varias, ajenos a un paso del tiempo mezquino.
En esta oportunidad nos convoca la intersección de Avenida Rivadavia y Rincón. Barrio de Balvanera. Esquina en ochava. Cuatro esferas blancas como faroles, custodian la entrada. Puerta de madera trabajada y arriba el cartel que lo dice todo “Café de los Angelitos”.
Si bien la historia cuenta que se fundó allá por 1890 con el nombre de Bar Rivadavia, a instancias de un italiano llamado Batista Fazio, fue su condición de punto de encuentro de malandras y caferatas, lo que terminaría dando su nombre.
Es que allí coincidían “Verdaderos angelitos”, según la socarrona afirmación del comisario de Balvanera quien, sin saberlo, le estaba dando carta de bautismo a uno de los más populares cafés de Buenos Aires.
De a poco, aquel bar ubicado en la orilla de la surgente ciudad, fue frecuentado por compadritos y mujeres referidas como “negras”, “pardas” y “chinas”.
Convirtiéndose en uno de los principales centros de payada, forma principal de la canción popular porteña hasta 1920, con payadores afroargentinos como Gabino Ezeiza e Higinio D. Cazón, y José Betinotti, entre sus habitués.
A José Ingenieros, Juan B. Justo y Alfredo Palacios se los veía seguido por Los Angelitos, lo mismo que a Manuel Gálvez.
Una noche de 1917, en este café, el dúo criollo Gardel-Razzano fue contratado por Mauricio Goddart, director artístico del sello Odeón. Con Cantar eterno y El sol del 25 se produjo su debut discográfico. Gardel vivió a poco más de una cuadra de distancia, en Rincón 135, en un departamento de un bello edificio afrancesado construido en 1925.
El Zorzal Criollo celebró algunos de sus triunfos, convidando, con su reconocida generosidad, a los amigos con unos pucheros que finalizaban con las primeras luces del día.
Y si de tangos hablamos, imposible no nombrar la pieza homónima, con música del propio Razzano y letra de Cátulo Castillo:¡Café de los Angelitos! ¡Bar de Gabino y Cazón! Yo te alegré con mis gritos en los tiempos de Carlitos por Rivadavia y Rincón…
Este café también fue frecuentado por radicales. Muchos políticos del viejo partido de Leandro Alem, la Unión Cívica Radical, solían acercarse para intercambiar y discutir ideas con sus adversarios socialistas.
Luego de sucesivas crisis económicas, en enero de 1992, sus dueños decidieron cerrar el negocio luego de 100 años de existencia y la casa quedó abandonada, deteriorándose a tal punto que se ordenó su demolición.
Afortunadamente, catorce años después, el café reabrió sus puertas el 19 de junio de 2007 con una decoración sobria y elegante. Madera oscura, cristales, vitraux, bronces y mosaicos calcáreos le otorgan su clara y tradicional personalidad. Una serie de 350 fotos ciudadanas, especialmente seleccionadas en archivos y museos, contribuye a recrear el clima y el ambiente de los tiempos iniciales.
El salón del Café propiamente dicho, desde donde puede verse y escucharse a algún músico que pone melodías a la tarde, se complementa con la sala de espectáculos y cena-show, la boutique de souvenirs y la sala de exposiciones y actos especiales.
EL DATO
En el año 2017 el reconocido Café estuvo involucrado en una Causa Judicial que tuvo como principales actores a la viuda del narco Pablo Escobar Gaviria, su hijo y el ex futbolista colombiano Mauricio “Chicho” Serna.
Todos ellos fueron procesados sin prisión preventiva, por lavado de dinero proveniente de la venta de drogas mediante inversiones inmobiliarias en la Argentina.
GPS
Av. Rivadavia 2100 (Esquina Rincón) * Capital Federal – Buenos Aires, Argentina
Tel 4952-2320
e-mail: info@cafedelosangelitos.com